Natalia Lafourcade, con 4 Grammys anglosajones y 18 latinos, reafirmó su conexión con las raíces de la música tradicional en un concierto memorable en el Carnegie Hall de Nueva York. Acompañada por la Filarmónica de Los Ángeles bajo la dirección de Gustavo Dudamel, Natalia ofreció un viaje musical que combinó temas como “Hasta la raíz” y “Mi Tierra Veracruzana” con clásicos latinoamericanos, como “Tonada de Luna Llena”.
En colaboración con Jon Batiste, Lafourcade sorprendió al público con reinterpretaciones de “Blackbird” y “Cucurrucucú Paloma”, destacando su capacidad de improvisación. “Hoy se están construyendo puentes”, expresó desde el escenario, aludiendo al encuentro entre culturas y ritmos.
A sus 40 años, Lafourcade, originaria de Veracruz, reflexiona sobre cómo alcanzar sus sueños y sobre el impacto de honrar las tradiciones en lugar de adaptarse al mercado anglosajón. Actualmente, trabaja en la versión acústica de su álbum “De todas las flores”, que se relanzará en noviembre, mientras sigue explorando nuevas direcciones creativas.